Esta boda fue muy emotiva y divertida. Se mezclaban invitados de Madrid con los de Agüero(Cantabria) un pueblo de tan sólo 200 habitantes. Por ello los novios quisieron darle un aire rústico, natural y divertido con la decoración.
La ceremonia civil se celebró en las antiguas escuelas del pueblo que estaban reformadas pero... había que arreglar y decorar.
Vista general
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| Detalle de la decoración de la mesa |
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| Detalle de las sillas |
El color elegido fue el naranja y por ello pusimos una alfombra de entrada de ese color. La mesa adornada con hiedra que parecía que trepaba por la mesa y gerberas naranjas. Las sillas del pasillo llevaban con cubos de zinc con trigo fresco y margaritas.
Todas las ventanas destacaban con una bola de hiedra, margaritas y gerberas.
Cierto es, que aunque las fotos no hacen mucha justicia el lugar quedó acogedor y sorprendente o al menos esa fue la impresión de los invitados.
A la entrada de las escuelas dos cuévanos con cucuruchos rellenos de pétalos.
Pero la mejor y mayor sorpresa fue cuando la novia apareció con su padre en una carroza tirada por un burro.
